Feedlots, camino a la mejor oferta de hacienda desde 2011
El mercado ganadero sigue con paso muy irregular, al ritmo del clima. Por
Ignacio Iriarte
En las semanas cortas, con feriados o con lluvias, la oferta es insuficiente y el mercado se entona.
Cuando las condiciones climáticas lo permiten, la faena se recupera y los precios de la hacienda ceden. La oferta de ganado bovino es irregular, pero más alta que el año pasado, permitiendo un consumo de 60 kilos per capita y exportaciones equivalentes a entre 270 y 300 mil toneladas anuales.
La mayor parte del incremento registrado en los embarques se debe a la demanda china. Hay todavía muchos caminos rurales cortados o rotos, campos aislados, inundados y una mortandad considerable.
Si el clima queda firme, el gran volumen de ganado encerrado en los feedlots evolucionará normalmente y entre fines de julio y agosto el mercado empezará a sentir una mayor oferta de gordo liviano.
Se ha ampliado la brecha –especialmente las semanas con poca oferta– entre lo que está dispuesto a pagar el consumo y lo que está en condiciones de pagar la exportación.
Esta diferencia se había reducido mucho en el primer semestre del 2016, después de la devaluación. La zafra de terneros está terminada entre un 85 a 90 por ciento y, de acá en más, puede expresarse en una mejora gradual del precio de la invernada en relación al gordo.
Se han publicitado y promocionado mucho las recrías, pero la oferta de novillos sigue estancada, y la oferta de novillos pesados sigue tan reducida como dos años atrás.
En resumen: mercado irregular, al compás del clima y de los feriados, una oferta creciente, una demanda (consumo y exportación) que sostiene valores para la hacienda que, en términos reales, resultan un 10 por ciento más bajos que los picos circunstanciales de un año atrás. Y un cinco por ciento más bajos que el promedio de los últimos nueve años.
“Feedlot”
En mayo entraron a los feedlots registrados por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) unas 524 mil cabezas, un ocho por ciento menos que igual mes del año pasado.
Pese a esto, el acumulado de entrada a los corrales del último trimestre (marzo-mayo) se ubica un 12 por ciento por arriba del año pasado, cuando el destete 2017 ha sido prácticamente el mismo que en 2016.
Ternera
En las últimas semanas ha caído el interés por las terneras de invernada, especialmente si éstas son muy livianas (entre 140 y 150 kilos).
El feedlot no las quiere, porque en general se engrasan bien antes del peso mínimo de faena. Y para madres, la demanda también es casi inexistente, porque se necesitaría –a partir de entre 140 y 150 kilos– una recría muy larga para llevarla a peso de entore.
Este año ha aumentado el volumen de terneras de invernada ofertado en relación al volumen de terneros machos, en otro indicio más de que la retención –si bien no ha desaparecido–, se ha ralentizado.
Durante 2017, a diferencia del año pasado, la mayoría de las terneras hembras –inclusive las más pesadas y las sobresalientes para futuras madres– han sido adquiridas por el feedlot .
Agrovoz