De nuestra edición gráfica
La cosecha esperada en la zona
En la mayoría de los establecimientos de la región la trilla fue de buena a muy buena. Además se superó en lugares el rinde histórico. Sin dudas las altas temperaturas y la falta de lluvias castigó los rindes y derivó en problemas de calidad en algunos distritos. Conozca los detalles de una cosecha que llegó a su fin.
Sin dudas la esperanza puesta en la cosecha fina 2013-2014 eran muchas. Y resulta que una vez finalizada no todo es color de rosa. Claro, los rindes en toda la región fueron de buenos a muy buenos con algunos casos excelentes y -otros pocos- discretos.
Es de destacar también que la falta de lluvia en Noviembre-Diciembre y las altas temperaturas afectaron a los cultivos, en algunos de ellos y conjuntamente con el viento fueron un verdadero “soplete” que apuraron a los sembrados en su etapa final disminuyendo los rindes y también bajando la calidad.
Si hablamos de números, en su mayoría fueron muy buenos inclusive superando las medias históricas. En tanto en calidad, hubo de todo tipo.
En Tres Arroyos
Para conocer detalles de la región dialogamos con el Ing. Gonzalo Rodera, del Dpto. Agronómico de la Cooperativa Agraria de Tres Arroyos. Admitió que la trilla fue “muy buena tanto la Cebada como el Trigo, ambos rindes en la zona de Tres Arroyos estuvieron arriba del promedio. Unos 4500 kilos en ambos casos” sostuvo.
El profesional destacó que “los trigos tuvieron un muy buen peso hectolítrico algunos de 89, en proteína fueron de normales a buenas, oscilaron entre 10 y 12.5”.
“En Cebada se cosechó de diferentes calidades. Hubo buenos calibres y proteínas la zona de Tres Arroyos y según algunos datos en la zona de coronel Dorrego y Oriente los calibres no fueron buenos y la proteína se ubicó en 6 y 7” según el profesional.
Al referirse a la diferenciación por zonas explicó que “los rindes fueron mayormente parejos en todos lados, por ahi se destacan en las zonas continentales, o sea de ruta 3 en dirección a Indio Rico. Por ejemplo en Nicolas Descalzi se cosecharon trigos de 4.400 kilos. También en la zona de De la Garma se encuentran buenos rindes”.
Al referirse a las pérdidas sufridas en el final del ciclo por las inclemencias climáticas minimizó el tema. “De acuerdo a las altas temperaturas, la falta de humedad y el viento hubo zonas donde se estiman unos 500 kilos de pérdidas, esas zonas son puntuales”.
Al referirse a las pérdidas sufridas en el final del ciclo por las inclemencias climáticas minimizó el tema. “De acuerdo a las altas temperaturas, la falta de humedad y el viento hubo zonas donde se estiman unos 500 kilos de pérdidas, esas zonas son puntuales”.
Sobre el final de la nota tiró una frase que preocupa y tiene que ver con las lluvias: “Igual preocupa mas la falta de humedad para sembrar soja que los rindes de la fina”.
En Coronel Dorrego
Para conocer detalles de la cosecha fina y la actualidad del distrito dialogamos con el Presidente de la Sociedad Rural dorreguense y Director de la Sociedad Rural Argentina. Javier Pérez Balade sostuvo que “la cosecha de fina venia prometiendo muy bien” dejando entreveer que no todo terminó como se esperaba.
“Se dieron intensos calores y fuertes vientos en Noviembre, lo que genero alta demanda de agua que no se correspondió con lo que nos ofreció el clima”.
Respecto a las cifras sostuvo que “los promedios de la Cebada rondaron en los 2800 kilos por hectárea mientras que en el Trigo se alcanzó los 3000 de promedio, con picos de 5000 kilos”.
Dijo además que “por lo antes dicho, el calor trajo problemas de calibre en las Cebadas, no pudiendo pasar ni como forrajera” recalcó.
El clima también viene complicando la gruesa, donde hay zonas de Dorrego que suspendieron la siembra por falta de humedad, y los sembrados tempranos la estan padeciendo, de tal manera que hay productores que la dan por perdida.
Javier Pérez Balade fue tajante en algunas de sus declaraciones referida a la mesa de los argentinos: “Lo lamentable que ocurrió es que cuando el Trigo subió también subió el pan, pero luego de la baja del cereal el pan en la góndola sigue intacto” destacó disconforme.
Por Pringles
En el distrito el régimen de agua fue ajustado destacó el productor y ruralista Luis Decaso. “No sobrepasaron los 500 mm pero se dieron en tiempo y forma para los cultivos de fina. Varias pequeñas aguas hicieron que los cultivos estén muy parejos en toda la zona, teniendo en cuenta que Pringles tiene distintos climas” admitió.
En éste sentido declaró que no hubo heladas tardías pero “sobre el final del ciclo una intensa ola de calor con clima seco afectó el llenado de los granos”.
Alli Decaso explicó que “los sembrados tempranos terminaron bien, pero los mas tardíos vieron afectados tanto en el rinde como en la calidad”.
Como es sabido, recordó las mangas de granizo que cayeron en varias ocasiones produciendo mermas puntuales.
“El rinde promedio fue superior al histórico para la zona, podemos estimar que rondó entre 2400 a 2600 kilos por hectárea”.
El pringlense tuvo su espacio para reiterar los problemas de comercialización del Trigo ante ausencia de una pizarra y sin entrega de ROE por parte del gobierno, al tiempo que agregó que “la opción son los molinos que no es fácil” dijo.
“La cebada continúa con precio deprimido” sentenció para cerrar diciendo que “la ola de calor afectó la siembra gruesa y enero se presenta seco poniendo en riesgo dichos cultivos”.
En Coronel Suárez
Eduardo De Sa Pereira es Jefe de la Agencia de Extensión Rural del INTA Coronel Suarez. Con el dialogamos sobre la cosecha fina y admitió que “se puede calificar de muy buena, con rendimientos de Trigo que oscilaron entre los 2.000 y 6.000 kilos por hectárea con un promedio que estaría en los 3.500 kilos”.
En cuanto a la Cebada, el Ingeniero sostuvo que los rindes oscilaron entre los 2.500 y 3.500 kilos con “un promedio que estaría rondando en los 3.000 kilos”.
También De Sa Pereira comentó sobre la calidad de los Trigos, dijo que hubo “altos pesos hectolítricos de entre 80 a 89 PH con una media de 83 a 84. La proteína fue baja a causa de altos rindes y quedó en un 9 %”. Sobre las Cebadas suarenses explicó que “tuvieron buen peso pero sin calidad. Los lotes de cebadas rechazados por la industria fueron por falta o bajo calibre”.
El Jefe del INTA argumentó el éxito en la correcta distribución de las lluvias. “Totalizaron en el partido 540, 588, 680 mm en localidades del norte al sur del Partido. De todos modos fueron suficientes y muy oportunas en primavera, con un gran aprovecha-miento por los Trigos, Cebadas y cereales de invierno en general en sus períodos críticos de máximos requerimientos” cerró diciendo en suarense.
Artículo publicado en nuestra edición grafica nº 91 correspondiente a Enero 2014 al 05/01/2014.-