Acuerdo con China:
¿Qué deben saber productores e industriales?
Los detalles del nuevo protocolo para exportar carnes frescas, congeladas y con hueso al gigante asiático.
Tras una negociación de más de un año, el miércoles pasado representantes del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y de la Administración General de Supervisión de Calidad Inspección y Cuarentena de China (AQSIQ) acordaron los nuevos protocolos para exportar carnes al gigante asiático, que incluyen bovinas enfriadas, congeladas y con hueso, y de otras especies.
¿Qué implica el acuerdo?
Valor Carne habló con técnicos del organismo sanitario argentino para conocer los pormenores en cuanto a sanidad e inocuidad.
“Los niveles de exigencia aumentaron ya que los mismos se establecen en función del producto de mayor riesgo, que es la carne con hueso, por el virus de la aftosa. Pero para el productor no habrá ningún cambio”, dijo el Director de Sanidad Animal, Ricardo Maresca.
El protocolo tiene 17 artículos que abarcan desde condiciones sanitarias de campo, identificación animal, trazabilidad, inspección ante y post mortem en la faena, habilitación de los frigoríficos, etiquetado y temperatura de congelación y mantenimiento de la carne. “Son requisitos higiénicos, de inocuidad y sanidad animal para garantizar que no se transmiten enfermedades al rodeo ni a los consumidores chinos”, explicó.
En cuanto a sanidad, China reconoce a la Argentina como país libre de aftosa y de BSE, entre otras enfermedades. Además, se amplió a siete la cantidad de males endémicos sobre los que se tienen que ofrecer garantías, entre ellos tuberculosis, paratuberculosis y brucelosis. “Si aparece alguna de estas enfermedades en un establecimiento, el Senasa tiene que bloquear los movimientos para evitar que sus animales vayan a faena para el mercado chino y dejar el campo en cuarentena. Esto no está en el actual protocolo e implica contar con un sistema de vigilancia y control que hubo que detallar y que fue aceptado por el AQSIQ”, afirmó.
Lo importante en materia de sanidad, es que “para el productor no hay nuevas exigencias, son las mismas que tenemos para todos los mercados. La trazabilidad debe ser grupal, como para el resto de las exportaciones (excepto la Unión Europea) y el mercado interno, y los animales que van a la faena china no se deben juntar con otros que tengan un estatus sanitario distinto, algo lógico que de todas formas quedó asentado en protocolo”, reveló.
Si bien aún falta la confirmación oficial china, los funcionarios locales descuentan que las plantas que ya están exportando quedarían automáticamente habilitadas.
“El protocolo no suma nuevas exigencias para la industria. La intensidad de los controles, la presentación anual de carpetas con toda la documentación de la planta, las verificaciones y la validación del Senasa como garante de las exportaciones a China va a ser la misma. En definitiva, termina siendo solo la ratificación de nuevos productos”, sostuvo Nicolás Winter coordinador de la Dirección Nacional de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria.
¿Las plantas que hoy pueden exportar estarán habilitadas? “No lo podemos asegurar hasta que no llegue el protocolo definitivo, pero estimamos que sólo tendrán que tramitar la incorporación de los nuevos productos y nosotros validarlos, lo que las dejará habilitadas”, afirmó. Y agregó: “con todo lo que hemos trabajado contamos con que va a ser un proceso sencillo”.
Para Winter, el nuevo protocolo “es una oportunidad para que la industria, gracias a la ampliación y diversificación de la cartera potencial de productos, pueda amortizar mejor las inversiones que ya realizó para enfrentar los requisitos sanitarios, de procedimientos y validaciones muy exigentes de China”.
De todos modos, habrá que esperar un poco más para que entre en vigencia el nuevo protocolo. “El miércoles se repasó el articulado y se cerró la negociación sobre algunos puntos. Ahora, se tiene que realizar la redacción e intercambio de los borradores y posteriormente la firma de las autoridades de la Argentina y China, algo que no debería demorarse mucho tiempo”, finalizó Maresca.
El mercado
Para Valor Carne, esta negociación es un éxito sanitario y diplomático. A diferencia de muchas opiniones vertidas en estos días, no creemos que se plasme en un aumento del comercio importante e instantáneo pero cubre aspectos de valía.
En primer lugar, va en el camino deseable de lograr la habilitación sanitaria de todos los productos en todos los mercados. Además, el permiso a la carne enfriada nos posiciona muy bien para el previsible crecimiento de esta corriente, merced a la demanda potencial de millones de chinos de altísimo poder de compra.
Por último, el renglón de respuesta más inmediata será el de la carne con hueso. Si bien hay competidores que hace tiempo pueden vender este producto, como Australia y Uruguay, éstos no muestran volúmenes muy grandes, lo que mejora las posibilidades para obtener renta extra. Sin embargo, en un producto típico como el asado, la Argentina tiene cierta desventaja ya que su mayor precio interno, en relación a los países mencionados, hace que sea menos competitiva. Pero en otros, como garrones, brazuelos, rabos, etc, tiene mucho para beneficiarse. (Valor Carne)