sábado, 3 de enero de 2015

Los números hablan por si solos
La Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca realizó una comparación de costos del 2013 al 2014
Los números dicen más que mil palabras. La variación de los costos del último año, pone en riesgo la próxima campaña agrícola en el sudoeste bonaerense. Al finalizar el año 2014 la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca realizó un análisis comparativo de los insumos y productos de la actividad agropecuaria. En el siguiente cuadro se muestra la variación del precio del dolar, de los principales insumos y de los valores de los cereales -hacienda a diciembre de 2013 y de 2014. 
Para el caso de la Agricultura, la variación de los insumos, especialmente el gas oil (en pesos) y en menor medida los fertilizantes (en dólares) muestran un fuerte crecimiento este año. Dentro de los agroquímicos, el glifosato de uso masivo si bien muestra una variación negativa, debemos recordar que su precio está expresado en dólares (divisa que registró un incremento interanual del 32%). 
Cuando analizamos los precios de los cereales de inviernos típicos de nuestra región, tanto el Trigo como la Cebada han retrocedido su valor drásticamente este último año. Esto hace que los resultados económicos (margen bruto) de esta campaña agrícola hayan caído, desde abril (momento de decisión de siembra) a diciembre (cosecha) un 83% en el cultivo de trigo y un 52% en la cebaba. 
Sin embargo, cuando analizamos la Ganadería, el resultado económico de los planteos de cría o ciclo completo frecuentes en nuestra área, cerraron en general con un panorama positivo. Por un lado el precio del ternero, que venía relegado desde el 2013, se acomodó y mantuvo, llegando a tocar valores máximos de hasta 26 $/kg. En el caso del novillo, que en agosto llegó a los 18 $/kg, los últimos meses del año por la sobreoferta proveniente de los feedlot (retrasada por el efecto de las lluvias), piso sus valores para finalizar el año a 15 $/kg. 
Cuando analizamos los insumo de la actividad, si bien el gas oil aumentó casi un 50%, la cebada y el maíz se mantuvieron relativamente estables (entre 1.200 – 1.000 $/tn. En efecto, la relación maíz – novillo que se mantenía los últimos años 9:1 este año llegó históricamente a 16:1.
Sumado a esto, debemos recordar la sobreoferta de pasto reinante esta campaña, producto de las abundantes lluvias registradas desde el mes de marzo (en algunos partidos de la región llovieron más de 1.000 mm, el doble que el promedio histórico). Esta situación favoreció al ganadero de nuestra zona donde este año se vio beneficiado por los buenos precios del ternero; raciones extras de verdeos y pasturas; y valores de cebada - maíz que estimularon la transformación del cereal en carne.