Las relaciones de precios durante el pico de la zafra de terneros
Transitando el momento de mayor oferta de terneros con destino invernada del año en curso, nos disponemos como es habitual, a revisar las relaciones de precios entre ésta categoría de animales y las que se disponen para ser enviadas con destino a faena.
Como venimos realizando desde hace un tiempo, volveremos a comparar la curva de relaciones de precios entre categorías de invernada y gordo, para el año en curso con la del año inmediato anterior, así como con la de los períodos comprendidos entre los últimos 12 años, el período 2005-2009, y el correspondiente al 2010-2016, ya que estos últimos 2 períodos corresponden a una fuerte liquidación de stock con bajos precios y a la posterior fase de recuperación con precios máximos en moneda constante respectivamente.
Lo primero que observamos de la dinámica de estas relaciones de precios es que la misma comenzó el año en línea con el promedio registrado para los últimos 12 años. Para el año pasado (2016) lo que se observa es que la relación comenzó muy favorable para la hacienda con destino invernada debido a la fuerte apreciación que tuvo el ternero a fines del año 2015, pero que no fue sostenida en el tiempo. Durante la temporada de zafra del 2016 se registraron retrocesos en los valores de esta categoría, coincidiendo con una apreciación de la hacienda con destino faena que hizo retroceder la relación de precios en el mes de Junio del año pasado a un nivel mínimo para toda la serie (1,11). A diferencia de esto que aconteció durante el 2016, el año en curso (2017) parece encaminado a mostrar una curva mucho mas “achatada” donde la dispersión de precios entre las categorías que construyen la relación pareciera que va a ser bastante acotada.
Por lo expuesto y lo observado hasta el momento, podemos inferir que para el resto de la zafra nos mantendremos en relaciones de precios entre categorías para invernada y con destino faena en valores similares a la media para el período más largo de la serie (12 años).
Por otro lado, aún resulta una incógnita el devenir de la segunda mitad del año en curso una vez que disminuya la oferta de terneros consecuentemente con la finalización de la temporada de zafra de los mismos. Al respecto es importante destacar la magnitud que ha tomado para muchos de los operadores de la cadena la intención de realizar recría de terneros a campo que serían ingresados a los corrales para su terminación durante el último tercio del año, ya sean estos engordes propios o de terceros.
Tendremos que permanecer atentos a la magnitud que puede adquirir este posible cambio en una parte de los sistemas de producción, así como si tendrá o no, el peso necesario para modificar el comportamiento estacional de los precios, principalmente sobre una oferta de animales con destino a engorde que históricamente ha mostrado una marcada escasez durante la segunda mitad del año calendario.
Decisión Ganadera