La presión fiscal se potencia con las inundaciones
El impacto del fenómeno afecta a los productores, pero también a los integrantes de localidades del interior relacionadas con el agro
Los productores agropecuarios de las zonas inundadas deben enfrentar dos perjuicios: además de las pérdidas de capital de trabajo por los efectos directos del agua en los sistemas productivos, se produce un incremento de la presión impositiva en las empresas.
Así lo demuestra un trabajo preparado por los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA), presentado por los técnicos Juan del Río y Juan Martín Capelle, en la reunión que organizó en la Sociedad Rural Argentina en Bolívar para considerar los graves problemas provocados por las inundaciones.
El trabajo consideró tres modelos de empresas agrícolas con campo propio, de Pehuajó, Bolívar y Azul, con dos niveles de afectación hídrica en los campos: 40 y 70 por ciento. Estas empresas desarrollan planteos de cosecha fina, que reducirán su producción por las pérdidas totales en áreas anegadas y por la reducción de los rendimientos en las encharcadas, y de cosecha gruesa, cuyos resultados serán muy dependientes de las condiciones de siembra y de cosecha.
En los modelos con inundación se consideró un aumento del 20% en los gastos de estructura, debido a mayores arreglos en los caminos y a reparaciones de la maquinaria, entre otros ítems.
El informe completo en nuestra próxima edición gráfica.