lunes, 15 de diciembre de 2014

Informe Especial de la BCPBB
Momento difícil para la agricultura 
Si bien los rindes obtenidos esta campaña son buenos, el bajo precio de los cereales pone en duda la próxima siembra de trigo y cebada en el Sudoeste Bonaerense 
La Bolsa de Cereales de Bahía Blanca, representada por su presidente Sr. Abel Di Meglio (foto) y su gerente Lic. Alicia Ruppel, han manifestado que la institución no es ajena a la difícil situación que está atravesando el sector agrícola, el cual en caso de no mejorar su rentabilidad, perjudicará en gran medida a todos los agentes de la cadena agroindustrial. 
En el presente año, las precipitaciones han beneficiado ampliamente los cereales de invierno de esta región. Son pocos los años en los cuales se pudieron observar continuas y oportunas lluvias que acompañaran tanto la siembra como el desarrollo de los cultivos. Concretamente en varios partidos del sudoeste bonaerense las precipitaciones superaron históricamente los 1.000 mm, llegando en algunos casos, como en el partido de Bahía Blanca, a duplicar los promedios de los últimos años. 
Un poco de historia: En abril, momento de tomar la decisión de siembra, los productores realizaban el análisis económico para determinar la factibilidad de siembra. En ese período, para una tecnología media utilizada, los márgenes brutos (MB: ingreso menos costos) mostraban un escenario totalmente diferente al actual: 
-Trigo: Precio MATBA En15= 195 u$s/tn - Rinde estimado: 3.000 kg/ha – MB= 150 u$s/ha aprox. 
-Cebada: Precio MATBA En15=160 u$s/tn- Rinde estimado: 3.500 kg/ha – MB=130 u$s/ha aprox. 
Presente: 
Transcurre el mes de diciembre, momento de cosecha y cumpliendo con las estimaciones, los rendimientos de los cultivos son efectivamente de buenos a muy buenos para la región. Las cebadas en casos puntuales superaron los 4.000 kg con un piso de 2.500 kg/ha. Si continúa normal el mes no habría que esperar menos para el rendimiento del trigo. 
Ahora bien, al mirar el precio de la pizarra de hoy vemos que los 145 u$s/tn de trigo están lejos de los 195 u$s/ha con los cuales el productor se decidió a sembrar, el margen cae de 150 a 25 U$S/ha. Recordemos que este número no contempla los gastos de estructura. Si a este número le sumamos el alquiler de 6 quintales por ha., los números no cierran en absoluto. 

Situación similar ocurre con la cebada, donde el valor de la misma hoy es de 135 u$s/ha (forrajera), los costos de producción ascienden los 300 u$s/ha y su margen pasó de 130 a 60 u$s/ha sin alquiler. Número que hoy cierra muy justo o directamente no alcanza para cubrir el arrendamiento. 
Seguramente este año el productor opte transformar el cereal en proteína, al utilizarlo para consumo de su hacienda. 
Ganadería: 
Recordemos que el sudoeste es una región históricamente ganadera, en la cual la agricultura por razones netamente de precios, ha pasado en los últimos años a tomar más importancia. Este año, el exceso de lluvia ha dejado muchos campos con suelos saturados, lo que impidió la siembra de los cultivos. Esta situación generó una abundancia de pasto proveniente de los campos naturales y verdeos de inviernos, donde la carga animal no registró ningún problema. 
El productor mixto de nuestra región se encontró con una sobreoferta forrajera que motivó retener las vaquillonas para aumentar el stock de su hacienda. Por otro lado el precio de la invernada se mantuvo firme desde el mes de julio llegando a pagarse valores históricos de hasta 26 $/kg. Este valor muy superior al del novillo, hoy a 16 $/kg, complica la reposición de los feedlot, pero es sostenido por la demanda de terneros proveniente de las zonas ganaderas en base a pasto, como es el sudoeste bonaerense. El criador busca cargar más kilos a su campo y sólo vende cuando tiene necesidad. Sin embargo es complicado para aquellos establecimientos que se han volcado netamente a la agricultura volver a la ganadería, por la gran inversión que hace falta no sólo en hacienda sino también en infraestructura, aguadas, alambrados y personal idóneo. 
En general los productores mixtos de nuestra región manifiestan que quieren volver a la actividad pecuaria o ampliar sus rodeos. Sin duda con estos valores la agricultura se reducirá por los altos costos de producción que esta requiere y el escaso margen que reditúa con los actuales precios. Estos comentarios, alertan y preocupan a toda la cadena agroindustrial, la cual se verá afectada en todos sus eslabones de comercialización, en caso que la superficie agrícola de reduzca en nuestra región.