jueves, 2 de febrero de 2012

La venta de maquinaria cayó 21%
Son cifras del tercer trimestre que se habrían acentuado por la sequía. El sector puede repuntar si se agiliza la devolución de impuestos.
Los fabricantes de maquinaria agrícola enfrentan una difícil situación por sus alicaídas ventas. Según un informe del Ieral de Fundación Mediterránea, la caída en las unidades nacio­nales vendidas fue de 21 por ciento en el tercer trimestre de 2011 (últimos datos oficiales), pero sería más marcada a partir de ese momento debido a la sequía en gran parte del país.
El trabajo firmado por el presidente del Ieral, Marcelo Capello y destaca que además de los problemas climáticos también influyeron restricciones crediticias y subas de tasas de interés en octubre y noviembre.
Como un paliativo inmediato, resalta que el sector mejoraría rápidamente si se agilizaran los mecanismos de devolución de impuestos o se encuentran alternativas para que las empresas puedan descargar sus saldos a favor.
Los fabricantes de maquinaria están sujetos a cuatro regímenes con demoras importantes: los saldos a favor de IVA por la alícuota reducida en las ventas; el IVA a favor por exportaciones; los reintegros de exportación y el bono fiscal para fábricas de bienes de capital.
"Lo que se pensó como aliento a la inversión o al sector, en realidad actúa con efecto contrario", advierte el trabajo.
Agrega que en una empresa típica (con baja inserción internacional) y con una demora de seis meses para el recupero efectivo de fondos, los montos inmovilizados por el fisco pueden representar hasta cinco meses de salarios.
Esto "aumenta considerablemente los costos financieros" de estas empresas.
El informe explica que el crecimiento del sector de los últimos años estuvo ligado a la demanda del agro y prestadores de servicio locales, pues el mercado externo fue un destino menos frecuente para la maquinaria nacional.
Las exportaciones estuvieron ligadas a acuerdos especiales, como en el caso de Vene­zuela. Las exportaciones de los principales productos que componen el sector crecieron 30 por ciento anual entre 2003 y 2010 al pasar de 42 millones a 268 millones de dólares entre ambas fechas.
El Ieral señala, sin embargo, que "su importancia relativa en el conjunto de exportaciones nacionales es aún muy reducida". Y agrega: "Ante los menguados niveles de competitividad actuales, el sector se ha vuelto altamente dependiente de las restricciones impuestas a las importaciones".
Por esta razón, Capello remarca que para el largo plazo, el principal desafío, y a la vez oportunidad, es consolidar su inserción externa para que las exportaciones amortigüen las eventuales caídas en el mercado interno.
Para ello se requiere, pri­mero, consolidar los mercados ya conquistados; segundo, alcanzar nuevos destinos, junto con el desarrollo de un alto nivel de competitividad genuina, que no dependa tanto del tipo 
de cambio.
Para esto, el mayor potencial del sector son las oportunida­des que podrían identificarse 
en mercados a los que hoy ya a­ccede Brasil, como Sudamérica y África. En particular, el socio del Mercosur participa con el 1,4 por ciento de las exportaciones mundiales de maquinaria, y Argentina sólo con el 0,2 por ciento.
En el logro de los objetivos, el Ieral remarca el papel fundamental del sector público, con políticas de promoción al sector, reducción de la presión tributaria y mayor financiamiento para los fabricantes y compradores, entre otros. (NAP)