Comunicado CEEA
A seis años de la 125 y la unidad del campo
Pasaron seis años desde que el campo y la ciudadanía reaccionaron masivamente contra la resolución 125, una medida confiscatoria y autoritaria dispuesta por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
En estos seis años, el campo evolucionó institucionalmente.
El 11 de marzo de 2008, se consolidó la unidad de las entidades agropecuarias, que permanece en el tiempo: la Mesa de Enlace representa la primacía del diálogo y la búsqueda del consenso, en pos de un objetivo común, el crecimiento de la producción agropecuaria como herramienta para el desarrollo inclusivo de la Argentina.
A pesar del tiempo transcurrido, el gobierno sigue sin entender que el campo es parte estratégica de la solución de los problemas económicos. Se dilapidaron muchas oportunidades de la mano de intervenciones de mercados, retenciones y restricciones a las exportaciones, subas de costos y una escasa respuesta ante las urgencias generadas por las inclemencias del tiempo que juegan una mala pasada a las producciones.
Los resultados de la política vigente ya son conocidos: Una superficie sembrada de trigo categorizada como la peor de los últimos 110 años, la desaparición del escenario productivo de más de 60 mil productores durante estos últimos 10 años, el cierre de 5000 tambos y más de 125 frigoríficos en el camino son ejemplos que hablan por sí mismos. Nada hizo el Gobierno, ni parece estar dispuesto a hacer, para que la producción llegue a su potencial en lechería o en ganadería, por nombrar dos producciones en crisis.
A esto se suma que hace apenas unos días escuchamos a la Presidente de la Nación, hablando ante la Asamblea Legislativa, enumerando únicamente cifras de producción, jactándose de grandes volúmenes con los cuales muy poco tuvieron que ver, y –lo que es más grave- demostrando el enorme desinterés por los productores, que somos quienes día a día hacemos realidad esa producción, aun a pesar de las pésimas políticas agropecuarias de este gobierno. Porque, aunque esta administración parezca no entenderlo, sólo con una agricultura con agricultores será posible lograr, además de metas grandilocuentes de producción, verdadero desarrollo integral, con gente viviendo y dándole vida a los pueblos.