lunes, 9 de noviembre de 2015

Argentina se cae del mercado mundial de Alimentos 
En los últimos 10 años Argentina ha perdido el liderazgo en la mayoría de los alimentos que exporta. 
De una canasta de once productos de origen agropecuario, Argentina descendió en ocho en el posicionamiento mundial, es decir en el 70% de sus principales productos. Las regiones de Argentina que producen carne, trigo, manzanas y girasol han sido las más afectadas según el informe económico elaborado por Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). 
La pérdida de posicionamiento a nivel mundial grafica la falta de competitividad y encuentra sus causas principalmente en las políticas públicas llevadas adelante en los últimos 10 años que pueden resumirse en la falta de previsibilidad y reglas de juego adecuadas hacia la inversión, carga impositiva récord, cupos para la exportación, aumento en los requisitos burocráticos y regímenes de información, una macroeconomía con grandes desequilibrios y la ausencia de una política anticíclica como la que llevaron a cabo países competidores como Brasil o nuestros clientes como Rusia. 
En materia de producción de soja tampoco las exportaciones fueron un éxito para Argentina. A pesar de que se mantuvo el liderazgo mundial en el complejo sojero, Brasil durante estos últimos 10 años se superó ampliamente en materia de producción creciendo casi un 100% para llegar a las 100 millones de toneladas. En tanto Argentina creció en un tercio comparado con Brasil. 
En el cuadro siguiente, se describe producto por producto la pérdida de importancia mundial de la Argentina en el Ranking de Exportadores de Alimentos. 

Cuadro N° 1 - Cambio en la posición de Argentina en el Ranking Mundial de Exportación de Alimentos 
Es claro que los resultados muestran que la política llevada adelante ha perjudicado la inserción internacional de la Argentina y por lo tanto la posibilidad de contar con mayores inversiones y empleo privado, limitando el desarrollo económico del país. No se trata simplemente de abrir la economía, ya que se debe contar con un claro y consistente Plan de Competitividad, de inserción externa de nuestras empresas, instrumentado como política de Estado. 
Se debe promover una Argentina Competitiva, con alta inserción externa, fundada en sectores estratégicos para el desarrollo, generadores de mayor valor agregado; una Argentina Productiva, en el sentido de promover la creación de empleos formales y de mayor productividad en el sector privado de la economía; y una Argentina Federal, contemplando en su diseño las potencialidades de desarrollo estratégico de cada región del país.