lunes, 16 de abril de 2012

FAA volvió a cuestionar el actual modelo
Para la entidad se llega al final de la gruesa con resultados magros. Amenaza con volver a las movilizaciones callejeras y en las rutas
Un nuevo cuestiona miento a la política económica y el modelo agropecuario impulsado por el Gobierno nacional realizó este viernes el el Consejo Directivo de la Federación Agraria Argentina, durante el encuentro que se concretó en esta ciudad con la participacipación de la casi totalidad de los delegados.
Durante el encuentro se analizó la situación de los productores en los distintos rincones del país, "se llegó al diagnóstico de que la crisis del sector se está profundizando".
"Se está llegando al final de la cosecha gruesa con resultados magros en muchísimas regiones. El faltante de maíz o de soja comienza a impactar en la economía real de los chacareros, en el comercio y la industria en distintas zonas. Esto agrava aún más el problema de pérdida de competitividad de la economía nacional, que la FAA viene señalando hace tiempo", dijeron los directivos de la entidad liderada por Eduardo Buzzi.
Calidad institucional
"Nos preocupa además el deterioro de la calidad institucional por el llamado “Boudougate”, las manipulaciones a la Justicia y el camino de impunidad que asoma en el horizonte de esa irregularidad. Si a esto le agregamos los mensajes de intento oficial de imponer un techo salarial al ingreso de los trabajadores, vemos un escenario preocupante para los pequeños y medianos productores, que dependemos del mercado interno", agrego el documento.
Acción gremial
En las últimas semanas, hubo una intensa acción gremial en varias regiones del país por los intentos de aumentar el impuesto inmobiliario rural. La suba de costos e insumos afecta la competitividad y pone en riesgo la viabilidad del pequeño y mediano productor. Es factible en este marco que se profundicen los conflictos, como los que han protagonizado en los últimos días los yerbateros y los tamberos.
Los tiempos se acortan y el gobierno nacional no debería dejar pasar la oportunidad de dar un giro razonable a sus políticas, con el fin de procurar soluciones e intentar consensos. De lo contrario, con una actitud cerrada, el escenario de la protesta agropecuaria empieza a emerger en el horizonte. (NAP)