miércoles, 14 de mayo de 2014

Informe económico 
El Girasol argentino, con
mejores perspectivas en el mundo 
Según el USDA, Argentina ofrecerá 600.000 toneladas más que el año pasado en los mercados internacionales, mientras que sus competidores del Hemisferio Norte recortarán su oferta en 2,56 millones de toneladas. También se espera una mayor exportación y consumo de aceite de girasol pese a la menor oferta mundial, configurando un panorama alcista en los precios dijo el Lic. Jorge Ingaramo, asesor económico de la Asociación Argentina de Girasol (ASAGIR). 
El último informe del USDA trae dos buenas noticias para el girasol argentino: en primer lugar, un incremento de 600.000 toneladas en la producción local, pasando de las 2,3 millones de toneladas de la campaña recientemente finalizada a 2,9 millones en 2014/2015 (lo que representa un crecimiento interanual del 26%). Por otro lado, el organismo prevé un recorte de 2,56 millones de toneladas en los tres principales competidores del Hemisferio Norte: Rusia, Ucrania y la Unión Europea. 
En el plano local, el país aún debe recuperarse del mal sabor dejado por los números de la campaña recientemente finalizada. Para el MINAGRI, área y producción cayeron 23,2 y 36,1%, respectivamente. Se habrían sembrado 1.276.000 hectáreas, de las cuales se perdieron 55.645. La producción alcanzaría 1,98 millones de toneladas, que sumada a stocks iniciales de 580.000, permitiría una molienda de 2,2 millones y una fuerte digestión de stocks de grano, para llegar a un nivel final de 290.000 toneladas, exactamente la mitad del valor inicial. 
Por otro lado, para la Bolsa de Cereales se sembraron 1,48 millones de hectáreas, 204.000 más que para el ente oficial. Se perdieron 69.200 hectáreas (un 4,7%), y de las cosechadas se obtuvieron 2,3 millones de toneladas, un valor similar al consignado por el USDA. El rendimiento medio fue de 16,3 qq/ha, inferior a los 19,5 qq/ha obtenidos en la campaña pasada. Para la Bolsa, de las cinco importantes regiones girasoleras –que representan más del 86% del área sembrada, según el organismo– tres obtuvieron rindes muy inferiores a lo habitual, por razones climáticas: en el NEA, se lograron 11,5 qq/ha; en el sudoeste de Buenos Aires y sur de La Pampa, igual cifra; y en el sudeste bonaerense se lograron apenas 20 qq/ha. En el norte de La Pampa y oeste de Buenos Aires, el promedio de 22 qq/ha es relativamente alto, mientras que para el centro y norte de Santa Fe, los qq/ha 18 logrados conforman un valor normal. 
En síntesis, por menor siembra y por afectación climática, para la Bolsa, la producción cayó 30% mientras que para el MINAGRI lo hizo en 36,1%. Esta crítica coyuntura vivida por el cultivo en nuestro país –y sus posibles soluciones– será uno de los ejes a tratar en el 6to Congreso Argentino de Girasol, que ASAGIR pondrá en marcha el 27 de mayo en el Hotel Sheraton Retiro de la Ciudad de Buenos Aires.
El informe del USDA 
Según el USDA, la producción de las siete principales oleaginosas crecerá un 2,4%, al igual que el crushing. Para el caso del girasol, se prevé una caída del 4,9%, superior al 2% de merma en la molienda. Además, el organismo pronostica una reducción en la producción de canola y una fuerte suba en la de soja. Los stocks finales de girasol bajarán un 21,7% en el mundo (unas 620.000 toneladas). Considerando este número y la menor oferta de canola, pueden esperarse mayores primas en los mercados de aceite, dada la relativa escasez en la materia prima de los más caros (girasol y canola) con respecto a la abundancia en la de los más baratos. Refuerza este argumento la comparación en la relación entre existencia final y molienda que, para las siete oleaginosas, crece de 19,4 a 22,4%, en tanto que para girasol, desciende de 7,5 a 6%. 
Para el USDA, los tres principales competidores del Hemisferio Norte reducirán su oferta en un 8,3% –las 2,56 millones de toneladas señaladas al comienzo de este informe–. Las bajas para Ucrania, Rusia y la Unión Europea son de: 13,8; 3,3 y 7,0%, respectivamente. La producción de los nueve principales aceites crecerá menos que el consumo: 3,3 versus 4,1%. Se exportará un 4,2% más y, pese al dinamismo de la demanda, habrá una leve acumulación de stocks finales (1%). No obstante ello, se prevé una menor relación de existencias finales versus crushing (de 11,2 a 10,8%). 
Es importante consignar que la producción conjunta de los dos aceites de mayor valor tendrá una leve reducción del 0,5%. Habrá una baja del 2% en la producción de aceite de girasol, pero subirá un 0,5% la producción del de canola, por aumento de su crushing y digestión de stocks. Particularmente, para el aceite de girasol, la producción declinará 2%, mientras que el consumo crecerá un 4,0% y las exportaciones, un 3,8%. La digestión de stocks será del 9,8%, lo que indica un panorama claramente alcista en materia de precios, y favorable en lo que hace a primas o descuentos con respecto a aceites de menor calidad. 
El documento del USDA postula un leve incremento en el consumo doméstico argentino de aceite de girasol, que alcanzaría las 732.000 toneladas, es decir, más de 17 litros por habitante. Dicho consumo representaría el 62% de las 1,18 millones de toneladas producidas. Las exportaciones de aceite se reducirían de 520.000 a 500.000 toneladas dado que, pese a la menor producción de grano de la última campaña, hubo una significativa reducción de sus stocks (por aumento de crushing), que se expresó en mayores exportaciones en el período 2013/14. Para el USDA, las participaciones en las exportaciones globales de aceite pasarán de 55,1 a 53,9% para Ucrania; 22,7 a 23,9% para Rusia; y 7,6 a 7,2% para Argentina. 
Precios y mercados 
Durante el pasado mes de abril, continuó la declinación de los precios de los aceites en Rotterdam. Comparados con los promedios de marzo, se registra una caída de apenas 1 dólar por tonelada en el de canola, así como mermas del 3,6; 2,4 y 0,3% en los de palma, girasol y soja, respectivamente. Si la comparación se efectúa con abril de 2013, el precio del aceite de palma mejora 8,2% ya que, hasta mediados del año pasado, hubo una virtual invasión del aceite de palma en los mercados, previa al ingreso de las abundantes cosechas de girasol y canola del Hemisferio Norte. Por esta razón, se registraron variaciones interanuales negativas, del 21,6; 10,4 y 8,8%, para los aceites de girasol, canola y soja, respectivamente. 
Al 9 de mayo, el aceite de girasol cotizaba 940 U$S/tn para mayo-junio y 945 U$S para julio-septiembre. Presenta descuentos con respecto a los de canola y soja. En el primer caso, del 2,1% para posiciones cortas (hasta julio) y de 1,3%, para agosto-octubre. Comparando con el aceite de soja, los descuentos son del 4% para mayo y del 3,4% para agosto. 
El MINAGRI publicó valores FOB de 900 y 857 U$S/tn, para los aceites de girasol y soja, con caídas interanuales del 17,8 y del 14%, respectivamente. 
Finalmente, la demanda muestra mucha cautela en los mercados del Disponible. Se registran valores en $/tn, para Rosario y San Lorenzo, de 2.400 y para Bahía Blanca y Necochea, de 2.050 y 2.010, respectivamente. Al Dólar comprador, Banco Nación, dichos precios se traducen en 303,5; 259 y 254 U$S/tn, respectivamente.