viernes, 14 de octubre de 2016

El Margen Bruto para la gruesa
Para la Campaña 2016-17, el Departamento de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca elaboró un cálculo de los números de la gruesa
El aumento en los precios y la leve caída de los principales insumos, mejoran sustancialmente los números para los cultivos de Maíz, Girasol, Soja y Sorgo en el sudoeste bonaerense. 
Finalizó septiembre y en el área de influencia de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca llega el momento de definir el cultivo a sembrar en esta nueva campaña gruesa. 
Al analizar el margen bruto de cada cultivo, el Maíz de baja densidad, sería el cultivo más rentable en la zona. Sumado a la ventaja de poder ser utilizado con fines forrajeros en nuestra región típicamente ganadera, por otro lado la cercanía al puerto reduce el impacto del flete, costo de gran incidencia para este cereal. 
El Girasol, se presenta como otra alternativa, fundamentalmente por la mejora sustancia en el precio del mismo, si bien la prima de 5-10 dólares por toneladas no resulta atractiva, recordemos que el año pasado se pagaba 20 usd/tn de bonificación por el contenido de aceite. Otra de los beneficios que presenta esta oleaginosa, es la posibilidad de liberar el lote más temprano, para poder realizar algún cultivo de invierno. 
La Soja, si bien este año no presenta atractivo económico, los buenos rendimientos obtenidos las últimas campañas, la simplicidad de su manejo y los menores costos necesarios para afrontar su siembra, se presenta como una buena alternativa, sobre toda en aquellos productores con dificultades financieras. 
Con respecto al Sorgo, con números alentadores, es otro cultivo apto, que siempre estuvo presente en la rotación de nuestra región. La mayor rentabilidad de los cultivos estaría dada principalmente por la mejora sustancial de los precios: Soja un 18%, Girasol un 30%, Maíz un 9% mientras que el Sorgo un 4%. 
Otro de los factores que colaboraron en mejorar la ecuación económica es la leve disminución de los costos directos, básicamente por la sutil baja en el precio de los agroquímicos (fertilizantes-herbicidas-insecticidas). La mejora de precio que sin duda beneficia directamente al productor y en forma indirecta a toda la cadena comercial, deja como resultado una gran oportunidad. 
Principalmente esta campaña donde la siembra de cultivos de fina como Trigo y Cebada no pudieron concretarse por el exceso hídrico en el perfil de los suelos, al momento de implantación. Situación que dejó un gran número de hectáreas libres para ser implantadas por cultivos estivales.
Por otro lado, los mejores beneficios económicos seguramente alentaran al productor a incorporar mayor tecnología en la próxima campaña gruesa, donde la incorporación de fertilizantes es una tarea pendiente para recuperar nuestros suelos, deficitarios de nutrientes esenciales. 
El Informe completo AQUÍ