miércoles, 2 de diciembre de 2015

La hacienda ya incorporó gran parte
de la expectativa de devaluación
Con las subas de los primeros días de esta semana, a valores constantes, el novillo en Liniers se acerca al récord de 2010, cuando se acababa de liquidar el 20% del stock nacional. El adelantamiento de los precios a las decisiones que se tomarían próximamente, no facilitará el accionar del nuevo Gobierno. 
En los primeros tres días de la corriente semana, y con una oferta muy importante, los precios en Liniers registraron aumentos del 23% para novillos, 20% para novillitos, 18% para terneros gordos y 11% para vacas, en relación a los valores de la semana pasada. 
Esta situación se observó a pesar de las entradas muy abundantes. Comparando estos tres días con los mismos de la semana pasada, el ingreso total fue 28% mayor, con extremos en novillitos (59%) y novillos (31%). 
El feriado del último viernes, que restó oferta, así como la previsión del feriado puente de los próximos lunes y martes, introdujeron un factor que exacerbó la demanda. 
El precio promedio de esta semana, en el caso del novillo y en valores corrientes, supera en 46% a la cotización media de agosto y septiembre, lo que supone que incorporó buena parte de la devaluación que el mercado prevé. 
Esto es llamativo por dos razones: el precio en dólares (oficiales) ya era excesivamente alto y el ganado que pasa por Liniers no es susceptible de ser exportado. 
A título anecdótico, el precio de esta semana equivale, con el tipo de cambio y las retenciones de hoy, a U$S 5,60 por kilo en gancho, un nivel decididamente excéntrico en el mundo. 
También es curioso que los consumeros que compran en Liniers crean que podrán traspasar, así nomás, estos nuevos valores a los eslabones comerciales siguientes (abastecedores, distribuidores, carniceros y consumidores). En las próximas semanas se dará la típica situación de una sobredemanda a causa de las Fiestas pero desde enero este factor desaparecerá. 
Para pensar 
Si contrastamos el nuevo valor del novillo con la serie de precios reales (deflacionados) vemos que ahora casi se ha alcanzado el pico del último ciclo ganadero, que se anotó en noviembre de 2010. Sólo faltan tres puntos porcentuales –es decir, nada- para ese nivel, que se anotó luego de una liquidación formidable del 20% del stock ganadero en los años previos. Tal cotización real luego no se pudo sostener a causa de la política que se siguió aplicando al sector. 
Este adelantamiento de los precios a las decisiones que se espera que se tomen la semana próxima, no facilitará el accionar del nuevo Gobierno. Si bien se necesitaban precios más estimulantes para atraer inversiones, para aumentar la producción de carne, y ésta requiere de plazos biológicos para llegar a manifestarse, la opinión pública suele simplificar los razonamientos y la ligazón entre unificación del mercado cambiario, eliminación de retenciones y ROEs y disparada de precios de la hacienda será inevitable. 
Esto no hace sino aumentar la necesidad de que la dirigencia, política, empresaria, explique de la mejor manera el proceso que se está atravesando y cuáles son los beneficios que se pueden esperar hacia adelante. 
Por Miguel Gorelik, Director de Valor Carne