jueves, 15 de diciembre de 2016

En clima se espera una "Niña" moderada a neutra 
El escenario climático esperado será menos riguroso que un episodio típico de “La Niña”, con numerosos riesgos que irán presentándose a lo largo de su desarrollo, requiriéndose una cuidadosa planificación para enfrentarlos con éxito 
Las perspectivas climáticas para 2017 hacen prever un verano con temperaturas variables y, según las regiones climáticas será muy altas, pero con períodos de frío intenso por la influencia de aire proveniente de la corriente polar, efecto que hace pensar en una corriente de “La Niña” moderada, con algunos períodos neutros, así se desprende del último informe publicado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. 
La campaña 2016/2017 (Julio de 2016 a Junio de 2017) continuará exhibiendo una gama de rasgos contrapuestos, que surgirán de la puja entre el lento avance de “La Niña”, la acción residual de “El Niño” y la acción negativa de la circulación polar, así como de varios factores secundarios, negativos y positivos, que contribuirán a esta compleja interacción. Por un lado, se producirán cortas e intensas rachas de tormentas, que descargarán sus precipitaciones en forma muy despareja, con riesgo de tormentas severas, con granizo y vientos, terminando con entradas de aire polar, con riesgo de marcados descensos térmicos tardíos, aunque este último riesgo no será tan intenso como el que se daría si “La Niña” alcanzara su pleno desarrollo en tiempo y forma. 
Por otro lado, se observarán lapsos prolongados secos y calurosos, cuya duración e intensidad irán acentuándose a medida que transcurra el verano. La evaporación de las aguas que afectan a campos del sur de Córdoba, norte de la Pampa, el sudoeste de Santa Fe y el Noroeste de Buenos Aires tardarán mucho en producirse. 
En forma paralela, los campos altos de esas mismas zonas observarán el riesgo de que se desarrolle un área con precipitaciones por debajo de bajo de los niveles normales, que determinarán que el balance hídrico negativo, limitando el potencial productivo de los cultivos y cortando la cadena forrajera. 
El escenario climático esperado será menos riguroso que un episodio típico de “La Niña”, con numerosos riesgos que irán presentándose a lo largo de su desarrollo, requiriéndose una cuidadosa planificación para enfrentarlos con éxito. 
Cabe destacar que las previsiones de algunos centros internacionales de gran prestigio, comenzaron a señalar la posibilidad de que la campaña 2017/2018 se desarrolle en el marco de un episodio de tipo “El Niño”, alejando el riesgo de un segundo episodio consecutivo de “La Niña”, que podría causar un fuerte impacto.
Con la llegada del otoño volverán a activarse los riesgos de heladas, aunque sin exceder los niveles normales para esa estación, que comenzarán a hacerse notorios a partir de mediados de Marzo, momento en que se intensificarán las entradas de aire polar, produciéndose descensos térmicos marcados, pero con poco riesgo de heladas. 
En Abril las masas de aire polar llegarán con vigor hasta todo el oeste serrano de La Argentina, Chile y Bolivia, así como al Planalto brasileño, y comenzarán a extenderse por las llanuras de La Argentina y el Uruguay. 
En Mayo, el dominio de los vientos polares se hará casi completo, llegando las heladas generales hasta el oeste de Argentina, Chile y el oeste de Bolivia, mientras que las heladas localizadas abarcarán gran parte de Argentina, el Uruguay, la Región Oriental del Paraguay y el sur del Brasil. 
Esta evolución, aunque no muy alejada de lo normal, marca una tendencia que hace pensar que 2017 podría presentar un escenario de moderado a alto riesgo de heladas tardías. (NAP)