Se recuperaron casi 6 millones de cabezas
Argentina finaliza el año con una recomposición del stock ganadero que lo encuentra cerca de las 53 M de cabezas, recuperando casi 6 M desde el peor momento de la última década.
En octubre de este año los habitantes han consumido 2 kg más de carne vacuna que en el mes de septiembre.
El deterioro fue de tal magnitud que una importante recuperación en los precios permitió comenzar un proceso de retención teniendo a la cría como uno de los grandes ganadores. La caída en el precio internacional de la soja ayudo a que en forma incipiente se recuperaran hectáreas de campos marginales para dar nuevamente cobijo a su producción histórica, la ganadería. En consecuencia, en cada ruta nacional, provincial o comunal, hoy es nuevamente posible ver la presencia de algunos lotes de vacas.
El engorde fue cambiando aceleradamente del formato tradicional de pasturas (o pasturas con suplementación) y se concentró fuertemente en los sistemas de confinamiento con una alta concentración territorial.
De esta forma, estamos finalizando el último bimestre del 2016 con una oferta abultada de hacienda para una demanda endeble, resultado de la ausencia de dinero en el bolsillo. Ni siquiera la cercanía de las fiestas motorizó incrementos importantes de precios. El gordo languidece en una caída casi estructural de la demanda ayudada por la aparición de los sustitutos, la carne aviar y cerdo.
La ganadería es un sector promisorio con un gran futuro pero que deberá pasar un año 2017 de amesetamiento hasta que aparezca la exportación, único sector que puede darle nuevamente aire a los precios y recomponer rentabilidades en la cadena. Para ello debemos esperar que aparezcan los novillos pesados, la materia prima principal de los cortes al exterior. Recién en 2018 comenzará un flujo más tonificado resultado del ciclo biológico propio del animal.
La cantidad de cabezas faenadas en el mes de octubre también muestra una recuperación del 4,2% frente al mes anterior, aunque se mantiene en el mismo porcentaje por debajo de la faena de octubre del año precedente.
Si se compara lo producido entre los meses de enero y octubre de 2016 con igual período del año 2015, se observa que la cantidad de cabezas que ingresaron en faena cayó cerca del 8% mientras que su producido registra un descenso del 5%, mostrando una recuperación en el kilaje de los animales faenados.
Por AgroLink