El secreto para controlar a las malezas resistentes
Su manejo es hoy una de las principales preocupaciones de los productores y formó parte de la agenda del 12º Curso Internacional de Agricultura de Precisión, en Manfredi, Córdoba
Por sus cualidades de herbicida de amplio espectro, bajo costo y efectividad, el uso del glifosato se masificó para el control de las malezas en los cultivos y tal fue su expansión que la naturaleza en muchos casos respondió con resistencia, especialmente en las gramíneas. "Eso al principio fue lento y ahora, ya hace un par de años, está empezando a entrar en la fase exponencial o lineal, donde todos los años estamos corroborando 2 o 3 especies con resistencia a este herbicida", aseguró Diego Ustarroz, del INTA Manfredi.
En el 12º Curso Internacional de Agricultura de Precisión y Expo de Máquinas Precisas, una dinámica de pulverización permitió conocer el funcionamiento de un equipo de aplicación selectiva, que responde a la necesidad de utilizar productos distintos sobre las malezas que sobreviven a los tratamientos tradicionales y puede economizar el agroquímico.
Mediante la emisión de luz roja, que es absorbida por las plantas vivas y una infrarroja, que es reflejada por éstas, la máquina escanea el suelo y detecta dónde debe colocar el agroquímico.
La importancia de esta tecnología es que permite reducir la cantidad de producto colocado por hectárea. "A nivel país hemos conseguido eficiencias tan grandes como economizar el 90% del producto", indicó Luis Adrover, de la firma D&E, que trabaja en el desarrollo del mercado argentino y la adaptación de esta tecnología a las condiciones de trabajo locales.
"El equipo está pensado para trabajar sobre barbechos, específicamente, y tiene grandes oportunidades comerciales dentro de la que es la zona Norte de la Argentina, donde vamos a encontrar malezas que cumplen más de un ciclo en la temporada de barbechos", expresó Adrover.