martes, 17 de septiembre de 2013

Cada vez mas cerca
Se viene el primer Trigo tolerante a sequía
Antes de fin de año, Bioceres iniciará el trámite de desregulación. 
Los ensayos a campo con las variedades de trigo genéticamente modificados para aumentar su tolerancia al estrés hídrico avanzan satisfactoriamente: antes de fin de año la empresa Bioceres presentará el dossier ante el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y la Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria (Conabia) para iniciar su proceso de desregulación. 
Este será un paso más para lanzar al mercado en 2016 la primera semilla de trigo tolerante a la sequía, luego de 13 años de investigación. La novedad no tiene antecedentes a nivel mundial; el desarrollo en la Argentina tiene entre sus actores a la Universidad del Litoral y el Conicet, a partir del descubrimiento realizado por el grupo de Raquel Chan, directora del Instituto de Agrobiotecnología del Litoral. 
La compañía Bioceres, cuyos accionistas son mayoritariamente productores argentinos, es la titular del gen HB4 y se asoció con la francesa Florimond Desprez para este desarrollo. 
La ventaja que ofrecerá la innovación es un incremento de productividad del cultivo de entre 10 y 15 por ciento en condiciones de sequía y salinidad. 
Uno de los ingenieros involucrados en este proyecto es Gerónimo Watson, ingeniero agrónomo egresado de la Universidad Católica de Córdoba, quien desde 2011 se desempeña como gerente de desarrollo del grupo Bioceres. Desde hace cinco años se hacen ensayos a campo y en 2012 se seleccionó el evento que será desregulado. 

“Todo lo que venimos haciendo hasta ahora nos da la información necesaria para mandar el dossier antes de fin de año”, confirmó Watson . Como toda variedad nueva, necesita pasar por un período de evaluación y mejoramiento antes de su lanzamiento comercial. 
Propiedades 
“En ambientes controlados se está evaluado la tolerancia a salinidad. Pero nos pareció más importante enfocarnos en la parte de estrés hídrico, lo que no quita que en esta etapa empecemos a caracterizarlo mejor en respuesta a otros factores”, explicó el técnico. 
“De nada sirve tener un buen gen, que otorgue una ventaja de rendimiento mayor en un ambiente de estrés hídrico, para luego colocarlo en un germoplasma que no sea competitivo. Puede sacar diferencia una variedad mejor”, agregó Watson. Para garantizar un buen “chasis”, la variedad tiene que ser de punta y que su potencialidad se exprese. 
En 2014 definirán la mejor alternativa. El gen HB4 –que fue extraído del girasol– aporta un rendimiento extra en ambientes con promedios por debajo de los 20 quintales. Pero lo importante, apunta Watson, es que “no hay penalidad en ambiente sin estrés, lo que sería inviable para el producto”. Es decir que en condiciones de alta productividad disminuye el efecto de tolerancia a la sequía pero no le juega en contra. 
En otros cultivos 
Además del desarrollo en trigo, se está muy cerca en soja, con un grado de avance muy parecido. En el caso del maíz, los ensayos vienen tres o cuatro campañas por detrás. En tanto que en alfalfa, recién este año se harán los primeros ensayos a campo de los eventos que fueron modificados el año pasado. 
La Voz del Interior