miércoles, 29 de junio de 2016

BREXIT y su impacto en el comercio de granos 
El viernes 24 de junio se conoció el resultado del referéndum británico. El SI ganó en la votación y de esta manera el Reino Unido tomó la decisión de retirarse de la Unión Europea. 
El mercado global no recibió de buena manera la noticia. La inmediata reacción fue el retroceso de los mercados bursátiles de todo el mundo. Las bolsas de Asia iniciaron el desempeño bajista, seguido por Europa quien marcó las mayores mermas, Estados Unidos y el resto de las plazas. 
Conocido el resultado comenzó un rebalanceo de monedas a nivel global. La libra esterlina retrocedió un 8% frente al dólar y el euro cayó más de un 3% frente al billete estadounidense. 
La retirada británica del bloque común europeo incrementó la incertidumbre global y con ello la tensión en los mercados. La primera reacción de los inversores fue tomar ganancias y desprenderse de posiciones volátiles y de riesgo y dirigirse hacia apuestas más estables y seguras. En la jerga, dicho desplazamiento se denomina vuelo a la calidad. Dólar, oro y bonos del Tesoro de los Estados Unidos ejemplificaron dicho movimiento anotando subas. 
El mercado de granos no escapó a las mermas. Estos productos están nominados en dólares y un fortalecimiento de esta moneda implica que los mismos pierdan competitividad exportadora. Un dólar más caro exige a los compradores más unidades de su moneda para acceder a una tonelada del producto. Para compensar esta pérdida de poder adquisitivo la secuencia lógica es una baja en el precio. 
Así, la corrección en la paridad de monedas resultando en un dólar fortalecido, es la primera vía de impacto bajista en los precios de los granos. 
El proceso de retirada del Reino Unido del bloque europeo es largo y tomará más de un año. Un importante número de variables tienen que coordinarse, por lo que no puede esperarse que los reacomodamientos financieros y económicos finalicen en el corto plazo. La volatilidad y riesgo en los diversos mercados se verá incrementada y se extenderá por un tiempo. 
¿Y cómo sigue el mercado granario? 
De no entrar a nivel global en un círculo vicioso que profundice la aversión al riesgo y con ello el deterioro de las principales monedas frente al dólar, que motive una salida de los fondos invertidos en granos hacia activos de menor volatilidad y riesgo, las cotizaciones de cereales y oleaginosos no deberían ingresar en un ciclo bajista de magnitud. 
Actualmente, los operadores del mercado se muestran más atentos a lo que suceda en el mercado climático de los Estados Unidos y a la evolución de los cultivos en el país del norte que a cómo se suceda la salida del Reino Unido de la comunidad europea. Un claro ejemplo de ello es la recuperación que el poroto de soja expresó en el arranque de la semana sobre el mercado de Chicago.
Igualmente, no se debe caer en el error de minimizar la trascendente decisión del Reino Unido al romper un esquema de integración de tal magnitud y sus potenciales impactos en las relaciones económicas y financieras del mundo. 
El tema exige pre-ocuparse, y una de las formas más simples es un seguimiento del mismo con un mayor grado de atención. Nuevamente cabe resaltar el rol de los instrumentos de cobertura de precios con los que cuenta el agro: Mercados de futuros y opciones permiten acotar el riesgo precio del negocio. Algo no menor en un contexto donde el equilibrio económico y financiero global no pasa por su mejor momento.
Dirección de Estudios Económicos de la Colsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca