viernes, 4 de octubre de 2013

El feedlot mira nuevos parámetros de calidad 
En EE.UU., el precio, las bonificaciones y los castigos que recibe el ganadero por sus animales dependen de una tipificación objetiva, que valora parámetros que hacen realmente al negocio de la cadena: calidad de producto y rendimiento del animal. 
Eso fue lo que observaron recientemente en la Universidad de Texas representantes de la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), que participaron allí de un curso sobre calidad de carne y se quedaron pensando cuánto de eso podría ser necesario en la Argentina. 
Un informe de la CAF destacó que la calidad del producto se mide por el marmoleo del bife y la osificación del animal. Por lo tanto, se está premiando directamente terneza, sabor y jugosidad de la carne. En lo referente al rendimiento, se mide lo que denominan “rendimiento al corte”. Es decir, cuánto rinde el animal en kilos de corte (no rendimiento de res). Un sistema similar, aunque con algunos matices, utilizan los australianos. “Son sistemas de tipificación modernos, objetivos, que permiten mejorar e integrar el negocio y maximizar precios para el productor”, dice el informe. 
Es una interesante alternativa, para evaluar. Pero el mundo de los feedloteros, un sector central de la ganadería argentina, sigue por estos días también otras noticias, como las que llegan desde Uruguay. 
Mientras la demanda por la carne de feedlot en la Unión Europea sigue impulsando la producción intensiva en el país vecino, se confirmó el acceso de carnes enfriadas uruguayas a Corea y las negociaciones para acceder a Japón estarían avanzadas. 
Así, el problema del status sanitario, que siempre fue un obstáculo para golpear las puertas de los mercados más valiosos del sudeste asiático, ya no lo es tanto para los uruguayos, que siguen marcando el rumbo de la ganadería rioplatense. La demanda de esos mercados se concentra en carnes con buen marmoleo, producto que se logra en terminaciones a corral. 
“Lo anterior demuestra que, más allá de las coyunturas, es hora de que las instituciones privadas del sector de ganados y carnes pongan sobre la mesa la discusión sobre calidad y tipificación, y le presenten al Estado Nacional una propuesta con una agenda concreta para su evaluación y puesta en marcha”, finalizó la CAF.