Presionan a Scioli
Como reacción al veto de Cristina Kirchner a la ley que bajaba las retenciones a 37 distritos bonaerenses, diputados e intendentes opositores de las zonas en emergencia se reunieron en el Congreso para expresar su protesta y avanzar con una estrategia a dos puntas: presionar a los legisladores para que insistan con el texto que aprobaron por unanimidad y pedir una audiencia con el gobernador Daniel Scioli, para exigirle que se ponga a la cabeza del rechazo al veto. Tarea difícil, porque el gobernador apoyó públicamente la decisión de Cristina.
Al día siguiente de publicarse el veto en el Boletín Oficial, la Mesa de Consenso Agropecuario que nuclea a diputados radicales, macristas, de la Coalición Cívica y peronistas disidentes -faltó el socialismo- armó una puesta en escena con 13 jefes comunales del sur y el centro provincial que pertenecen al Acuerdo Cívico. Faltaron 6 opositores -algunos con aviso- y mandó adhesión escrita un solo justicialista, Cristian Breitenstein, de Bahía Blanca. Es un kirchnerista crítico que se negó a una candidatura testimonial.
Del lado opositor estuvieron, entre otros, Francisco de Narváez, Felipe Solá (por el PJ disidente), Adrián Pérez (jefe de la Coalición Cívica), Christian Gribaudo (el macrista que convocó, en su carácter de vice de la Comisión de Agricultura) y Pedro Morini, puntal de la UCR en temas agrarios.
Diputados e intendente advirtieron sobre el "peligro" que implica la práctica del veto, con el antecedente del que aplicó Cristina a la Ley de Glaciares el año pasado. Morini habló de una "ofensa al Congreso" y Pérez acusó al Gobierno de "potenciar" el conflicto con los ruralistas. "Hay una política de retenciones y es incrementarlas", dijo. Francisco De Narváez, autor del proyecto que generó la polémica, adelantó que en diciembre -cuando asuman los diputados electos- pedirá "la revisión de las leyes que atenten contra lo que se votó el 28 de junio".
Participaron los intendentes de Necochea, Guaminí, Saavedra, Tres Lomas, Coronel Dorrego, Carlos Casares, Coronel Pringles, Hipólito Yrigoyen, Puan, Bolívar, Saliqueló, Pellegrini y Benito Juárez. Además de los ruralistas y diputados electos Ulises Forte y Pablo Orsolini. (Fte.: Clarín)
Al día siguiente de publicarse el veto en el Boletín Oficial, la Mesa de Consenso Agropecuario que nuclea a diputados radicales, macristas, de la Coalición Cívica y peronistas disidentes -faltó el socialismo- armó una puesta en escena con 13 jefes comunales del sur y el centro provincial que pertenecen al Acuerdo Cívico. Faltaron 6 opositores -algunos con aviso- y mandó adhesión escrita un solo justicialista, Cristian Breitenstein, de Bahía Blanca. Es un kirchnerista crítico que se negó a una candidatura testimonial.
Del lado opositor estuvieron, entre otros, Francisco de Narváez, Felipe Solá (por el PJ disidente), Adrián Pérez (jefe de la Coalición Cívica), Christian Gribaudo (el macrista que convocó, en su carácter de vice de la Comisión de Agricultura) y Pedro Morini, puntal de la UCR en temas agrarios.
Diputados e intendente advirtieron sobre el "peligro" que implica la práctica del veto, con el antecedente del que aplicó Cristina a la Ley de Glaciares el año pasado. Morini habló de una "ofensa al Congreso" y Pérez acusó al Gobierno de "potenciar" el conflicto con los ruralistas. "Hay una política de retenciones y es incrementarlas", dijo. Francisco De Narváez, autor del proyecto que generó la polémica, adelantó que en diciembre -cuando asuman los diputados electos- pedirá "la revisión de las leyes que atenten contra lo que se votó el 28 de junio".
Participaron los intendentes de Necochea, Guaminí, Saavedra, Tres Lomas, Coronel Dorrego, Carlos Casares, Coronel Pringles, Hipólito Yrigoyen, Puan, Bolívar, Saliqueló, Pellegrini y Benito Juárez. Además de los ruralistas y diputados electos Ulises Forte y Pablo Orsolini. (Fte.: Clarín)