Preocupa la falta de
humedad en los suelos
Lo confirmó la Ing. Agr. Jimena Berriolo y el Ing. Agr. Marisa Domenech en el informe RIAP del área de influencia de la Chacra de Barrow del mes de agosto, la principal preocupación pasa por la falta de humedad en la mayoría de las zonas productivas regionales.
Allí se admite que se produjo una pérdida de agua del perfil del suelo, ya que en el 75% de los lotes el contenido Agua Útil Actual Total (AUA) ha sido deficiente a crítico para el desarrollo de los cultivos. Los porcentajes más bajo de AUA se observaron en los primeros 20 centímetros del perfil. Las diferencias de humedad de suelos dependen fundamentalmente de la historia del lote, del tipo de barbecho realizado y del sistema de siembra.
Los lotes de trigo presentaban un estado muy bueno en el 41,3% de los casos, bueno en el 47,8% y regular en el 10,9%. El 2,2% de los trigos se hallaban en emergencia del coleoptilo, el 32,6% en 1ª, 2ª y 3ª hoja desarrollada, el 63,1% en macollaje (con 1 a 4 macollos) y el 2,2% restante en 1º nudo detectable.
En cuanto a los lotes de cebada, los mismos se hallaban en mejor estado que los trigos, ya que el 50% estaba muy bueno, el 44,4% en bueno y el 5,6% restante regular. El estado fenológico preponderante era macollaje (83,3%) con 1 a 5 macollos cada planta; el resto (16,7%) se hallaba con 1 o 2 hojas desarrolladas. La condición de los mismos variaba de muy buena a regular; hallándose el 50,0% en muy buena condición, el 44,4% en buena y el 5,6% restante en regular.
En cuanto a enfermedades se observaron varios lotes con escaldadura (24,0% de los lotes). La incidencia de malezas variaba desde ausencia o controladas (55,9%), leve (38,9%) y moderada intensidad (5,5%).
Allí se admite que se produjo una pérdida de agua del perfil del suelo, ya que en el 75% de los lotes el contenido Agua Útil Actual Total (AUA) ha sido deficiente a crítico para el desarrollo de los cultivos. Los porcentajes más bajo de AUA se observaron en los primeros 20 centímetros del perfil. Las diferencias de humedad de suelos dependen fundamentalmente de la historia del lote, del tipo de barbecho realizado y del sistema de siembra.
Los lotes de trigo presentaban un estado muy bueno en el 41,3% de los casos, bueno en el 47,8% y regular en el 10,9%. El 2,2% de los trigos se hallaban en emergencia del coleoptilo, el 32,6% en 1ª, 2ª y 3ª hoja desarrollada, el 63,1% en macollaje (con 1 a 4 macollos) y el 2,2% restante en 1º nudo detectable.
En cuanto a los lotes de cebada, los mismos se hallaban en mejor estado que los trigos, ya que el 50% estaba muy bueno, el 44,4% en bueno y el 5,6% restante regular. El estado fenológico preponderante era macollaje (83,3%) con 1 a 5 macollos cada planta; el resto (16,7%) se hallaba con 1 o 2 hojas desarrolladas. La condición de los mismos variaba de muy buena a regular; hallándose el 50,0% en muy buena condición, el 44,4% en buena y el 5,6% restante en regular.
En cuanto a enfermedades se observaron varios lotes con escaldadura (24,0% de los lotes). La incidencia de malezas variaba desde ausencia o controladas (55,9%), leve (38,9%) y moderada intensidad (5,5%).