martes, 9 de junio de 2009

Los feedlots no dan para más
“Estamos a las puertas de la recuperación del sector, no por virtud sino por defecto”, le dijo el consultor Víctor Tonelli al numeroso grupo de productores que con atención siguió el ciclo de charlas desarrollado en el marco de ExpoDaireaux.
“Las políticas oficiales terminaron por perjudicar mucho más al sector ganadero. Generaron la caída de la producción y van a terminar con un incremento del precio al consumidor”, dijo Tonelli.
Para el especialista, el sistema de feedlot, fortalecido con la política de gobierno, está rompiendo la ganadería argentina. “Hoy los subsidios representan el 50 % del precio del ternero. El invernador que no recibe subsidios no puede trabajar”, dijo. El feedlot creció el doble del año pasado a éste. En la actualidad, ya no hay más lugar en los feedlots. De estos establecimientos surge el 65 % de la oferta del mercado.
“La buena noticia es que este sistema no da para más. Podrá llegar a julio-agosto, se va a acentuar la falta de pago de los subsidios a partir de las elecciones”, le dijo Tonelli a los productores. ”La caída de la oferta va a ser bestial. Entonces, la suba del precio será irreversible”, vaticinó.
Para Tonelli, la ecuación es clara: caída de stock + seca + caída de los subsidios + oferta ridículamente baja = suba de precios.
A la hora de los argumentos, el consultor reveló algunos datos que resultan importantes y dan cuenta de la situación actual. En primer lugar, es inaudito el nivel de consumo de carne que tenemos los argentinos. De 2005 a 2008, el consumo de carne vacuna pasó de 62 a 69 kg/hab/año. En total, sumando los demás tipos de carne, los argentinos consumimos 110 kg.
Según Tonelli, la situación actual habla de un efecto tenaza. A los subsidios para la faena de animales livianos para consumo se le suma el desincentivo para la producción de animales pesados para exportación y la gran faena de hembras (más del 50 % del total). “La Secretaría de Agricultura de la Nación dejó de publicar la cifra así que probablemente el porcentaje haya ascendido”, expresó el analista.
Según los datos ofrecidos por el orador, en el año 2005, el 9 % del stock de vacas iba a faena. En 2008 esa cifra ascendió al 12 %. En el caso de las vaquillonas pasó del 17 al 23 % y el de las terneras hembras del 26 al 32 %. “La consecuencia inmediata de esta política es el envejecimiento del rodeo”, dijo Tonelli.
“El gobierno habla de redistribución y así es como le da 20 pesos por ternero al productor y 200 por ternero a los feedloteros”, ironizó el consultor.
El tema de los cueros también fue traído a consideración por el especialista. Poniendo el ojo en las curtiembres, dijo que los exportadores vendieron apenas un 20 % menos de valor pero a los productores le bajaron el precio del cuero un 90 %. Los productores no debemos olvidar que en condiciones normales, el cuero representa un 12 % del valor del animal.
Fte: TodoAgro